viernes, 23 de marzo de 2012

NO PARO

Corro por el túnel donde los fantasmas se alimentan de mi aliento.

Me agito entre palabras que torturan mi mente y acarician un alma de mil vidas.

El lugar empieza a achicarse sobre mi.

Mis pies tiemblan buscando el sustento que los lleve a la orilla de mi propio puerto.

Entre miles de círculos el infierno se posó sobre mi reinado.

Vagabundos de historias sin fin buscan desgarrar lo poco que queda de piel.

Ahora siento demasiado.

No paro.

Tropiezo con todo y me arrastró.

Sangro.

No paro.

Mi cabeza marca el pulso de un grito a la nada y mi garganta se rebela.

Dónde estás? No te busco porque quiero que me encuentres.

No paro.

Escucho miles de voces que murmuran. Gritan. Callan.

Se estrella la noche sobre mi.

No paro.

Y de golpe sí paro.

Silencio.

El aire huele a vos.

No te veo, pero, se que estas.

Intento seguir mi carrera hacia la nada.

Me detiene una fuerza única. No lastima, pero, inmoviliza.

Paralizada ante la nada vi el todo.

Sentí la calma.

La bestia se durmió. Se sedó.

El infierno ya no se siente tan acogedor.

Mi corazón golpea y duele.

Cerré mis ojos y entendí todo.

Desperté de mi realidad y el sueño se apoderó del día y la noche volvió a hacerme compañía.

¨Angel de mi soledad sentí piedad de mi¨, grité callada.

Se desvanecieron los abismos y el destino me jugó una buena pasada.

La vida te encierra, golpea, lastima, pero, siempre es vida y pido otra carta…no paro y gano.

Al final de la historia me di cuenta que la verdaderas batallas solo se ganan resistiendo y así la noche se hizo amiga, el infierno fue cielo y el cielo tuvo mil vencedores.